De que lado está usted
que me expulsa de España
cuya patria, tierra y sangre
es parte de la mía,
aunque mi color oscuro
es ajeno a sus neuronas
y de fácil olfato policial;
carne fresca para los carceleros
cazadores de inmigrantes
en las calles madrileñas,
cuyos cupos esconde
pinocho del interior.
¿Dónde está la justicia, señora?
¡Señora!, ¿Dónde está la justicia?
¡Quiero verla!,
Quiero verla
en el juicio final de los pecados,
entre el diablo y dios en el infierno
y aunque pierda justo la batalla
Yo, me iré,
marcharé,
y encontrarè el lugar
donde están los angelitos negros.
3 de abril de 2010
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